El futbolista colombiano Jackson Martínez, después de un paso más que discreto por la liga española con el Atlético de Madrid, fichó el miércoles por el club Guangzhou Evergrande de China.
Sin embargo, las fotografías que han hecho públicas los dos equipos implicados en la operación muestran que el delantero de 29 años no parece muy contento con el traspaso.
Esto pese a que la transacción tuvo un valor de US$47 millones (algo así como $32.700 millones de pesos chilenos) y a que él se convertirá en uno de los futbolistas mejor pagados del mundo, según una nota publicada por el diario español El País.
Su sueño era triunfar en un equipo europeo y eso podría explicar que no esté emocionado con su aventura en tierras asiáticas. Incluso ha evitado comentar su fichaje en Twitter.
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